World Day for Consecrated Life

( en español )

As we mark the World Day for Consecrated Life in this 50th year since the founding of the Diocese of Arlington, we reflect on the men and women religious who played a critical role in the founding and building of our diocese, giving up everything to follow Christ.

Our diocese has benefitted greatly from the many sisters, priests, and brothers in religious and consecrated life who founded parishes, schools, and other institutions as the Catholic population of Virginia grew over the decades. When the diocese was established in 1974, men and women from 34 unique congregations participated in crucial ways.

This service in our diocese has continued - and expanded - with 58 religious order priests, six religious brothers, and 97 religious sisters in the diocese who staff parishes, schools, hospitals, and ministries of charity. Additionally, we are grateful for the cloistered religious who support us with their constant prayer. There are also 49 men and women from our diocese currently in formation with various religious orders.   

As we celebrate our diocesan Jubilee, we reflect on the tremendous contributions these men and women have made to our local church. We pray for them and for all called by God to follow in their footsteps, renewing our diocese for years to come.


Jornada Mundial de la Vida Consagrada

Al conmemorar la Jornada Mundial de la Vida Consagrada en este año 50 desde la fundación de la Diócesis de Arlington, reflexionamos sobre los religiosos y religiosas que desempeñaron un papel fundamental en la fundación y construcción de nuestra diócesis, renunciando a todo para seguir a Cristo.

Nuestra diócesis se ha beneficiado enormemente de las muchas hermanas, sacerdotes y hermanos de vida religiosa y consagrada que fundaron parroquias, escuelas y otras instituciones a medida que la población Católica de Virginia crecía a lo largo de las décadas. Cuando se estableció la diócesis en 1974, hombres y mujeres de 34 congregaciones únicas participaron de manera crucial.

Este servicio en nuestra diócesis ha continuado - y ampliado - con 58 sacerdotes de órdenes religiosas, seis hermanos religiosos y 97 hermanas religiosas en la diócesis que trabajan en parroquias, escuelas, hospitales y ministerios de caridad. Además, agradecemos a los religiosos de clausura que nos apoyan con su oración constante. También hay 49 hombres y mujeres de nuestra diócesis actualmente en formación en varias órdenes religiosas.

Al celebrar nuestro Jubileo diocesano, reflexionamos sobre las enormes contribuciones que estos hombres y mujeres han hecho a nuestra iglesia local. Oramos por ellos y por todos los llamados por Dios a seguir sus pasos, renovando nuestra diócesis para los años venideros.