Bishop Burbidge Addresses President Biden's Abortion Agenda

( en español )

President Biden recently stated that if the Democratic Party has control of Congress following the November 2022 election, his top priority will be pro-abortion legislation. I condemn abortion and any political tactic that would codify abortion as national policy. Fundamentally, abortion ends the life of a precious child and deeply wounds the child's mother. The role of Congress is to pass laws that serve the common good-and yet this priority of the president only brings about pain and death. 

We witness firsthand the wounds women and men endure after ending the life of their child. It is clear that they deserve better than abortion. Through various ministries, the Diocese of Arlington accompanies those who have suffered the pain of abortion.  

Any attempt to codify abortion, rather than to enact policies that support unborn children and mothers, should be met with peaceful, active and staunch opposition from the Catholic faithful and all people of good will. While overturning Roe v. Wade was perhaps the most significant pro-life victory in the last century, there is much work to be done to make abortion unthinkable and support mothers in need. The Catholic Church has long offered hope, healing and material support to the vulnerable. We stand ready to continue serving all expectant families in need. 

To read a recent statement by Archbishop William E. Lori of Baltimore, chairman of the U.S. Conference of Catholic Bishops' Committee on Pro-Life Activities, on this topic, CLICK HERE.


Monseñor Burbidge aborda la agenda del Presidente Biden sobre el aborto

El Presidente Biden declaró en fecha reciente que, si el Partido Demócrata tiene control del Congreso después de la elección de noviembre de 2022, su principal prioridad será promulgar una legislación en pro del aborto. Yo condeno el aborto y cualquier táctica política que lo codifique como política nacional. Fundamentalmente, el aborto acaba con la vida de un precioso niño y hiere profundamente a la madre de ese niño. El papel del Congreso es aprobar leyes al servicio del bien común; con todo, esta prioridad del presidente solamente trae dolor y muerte.

Hemos sido testigos directos de las heridas que sufren los hombres y las mujeres después de terminar con la vida de su hijo. Queda claro que ellos merecen algo mejor que el aborto. Por medio de varios ministerios, la Diócesis de Arlington acompaña a quienes han sufrido el dolor del aborto.

Cualquier intento por codificar el aborto, en lugar de promulgar políticas que apoyen a los niños que están por nacer y a sus madres, debe enfrentarse con oposición pacífica, activa y firme de los fieles católicos y de todas las personas de buena voluntad. Aunque tal vez la derogación del fallo en el caso de Roe v. Wade fue la victoria más significativa a favor de la vida en el último siglo, queda mucho trabajo pendiente para hacer que el aborto sea inconcebible y para apoyar a las madres en situación de necesidad. Por mucho tiempo, la Iglesia Católica ha ofrecido esperanza, sanación y apoyo material a las personas vulnerables. Estamos listos a seguir sirviendo a todas las familias necesitadas que esperan niños.

Para leer una declaración reciente de Monseñor William E. Lori, Arzobispo de Baltimore y presidente del Comité de Actividades en Pro de la Vida de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos, sobre este tema, HAGA CLIC AQUÍ.